Devocional Julio 21 de 2011

"Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra. No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley." Romanos13:7-8

EL CABALLO Y EL CERDO

Un hacendado tenia un caballo que enfermo y para curarlo el veterinario le dijo: "Tiene un virus, y es necesario que toma este medicamento tres dias consecutivos. Si en tres dias no mejora entonces no queda mas remedio que sacrificarlo" El cerdo, que escuchaba la conversacion, se acerco y le dijo: "¡Fuerza amigo! Levantate de ahi, sino vas a ser sacrificado." Al segundo dia le dieron nuevamente el medicamento y el cerdo se acerco y le dijo: "¡Vamos mi gran amigo! Levantate, sino vas a morir, vaos yo te ayudo" Al tercer dia le dieron el medicamento y el veterinario dijo "probablemente vamos a tener que sacrificarlo mañana, puede contagiar a los demas caballos"

Cuando se fueron, el cerdo se acerco y le dijo: "Vamos amigo es ahora o nunca. Animo...fuerza... Yo te ayudo... vamo ... un, dos tres... despacio... asi ... eso... eso... Ahora corre despacio... mas rapido ... Fantastico ... corre ... corre... ¡Venciste campeon!" Al llegar el dueño del caballo, ve al caballo corriendo y dice: "Milagro, el caballo mejoro. Hay que hacer una fiesta, vamos a matar al cerdo para comer y festejarlo..."

Pocas veces se percibe quie es el que realmente tiene los meritos por el suceso. Muy a menudo, no recibe el premio quien lo merece sino otro. Seguramente te paso en el colegio, en el trabajo o entre tus amigos, que el merito de tu esfuerzo se lo llevo otro.

Pablo sabia de esto. Sabia cuan importante es el aliento, el sosten, el premiar a cada uno por su esfuerzo y dedicacion. El sabia que Dios ve todo y que recompensa todo. Todos necesitamos un aplauso, una palmada en l hombro, una felicitacion por el buen trabajo, un reconocimiento, una retribucion por lo que hicimos bien.

Empieza tu a hacerlo hoy mismo, a reconocer lo bueno del otro. Que no le debas nada a nadie, mucho menos, reconocimiento y respeto. Valora el esfuerzo ajeno, anima al que se siente ignorado, no te juntes solamente con los que son aplaudidos, busca al que esta solo, al que realiza ese trabajo anonimo.

LA BIBLIA ESTA LLENA DE ANONIMOS QUE HICIERON GRANDES APORTES A LA OBRA DE DIOS

Tomado de Una Pausa en tu Vida