Devocional Noviembre 6 de 2011

"¿Tú quién eres, que juzgas al criado ajeno? Para su propio señor está en pie, o cae; pero estará firme, porque poderoso es el Señor para hacerle estar firme." Romanos 14:4

BUSCANDO FALTAS

En un diario de Ontario, Canada, aparecio el siguiente aviso: "El lector quiza encuentre algunos errores de imprenta en este diario. Tenga en cuenta que son intensionales. Este diario trata de imprimir algo para todo el mundo y hay personas que siempre buscan faltas"

Es verdad. Siempre hay quienes solo se relacionan con otros para encontrar y publicar sus faltas. Obviamente, que nadie quiere relacionarse con ellos. Son obsesivos con los defectos ajenos y permisivos con los propios. Si atendieramos a nuestros errores con el mismo afan que denunciamos los de los demas, seriamos mucho mas maduros ¿Verdad?

El segundo libro de Samuel, capitulo nueve, narra la historia del rey david y su ascenso al trono de Israel. En honor a su amigo Jonatan, David pregunto si habia quedado alguien vivo de la familia de Saul, para hacer misericordia por amor a su amigo. Un siervo del palacio de nombre Siba, responde sobre el paradero de un descendiente de Saul de nombre: Mefiboset, pero adjunta su perfido comentario sobre tal muchacho: "pero es lisiado"

¿Quien le habia preguntado a aquel empleado sobre las limitaciones fisicas de Mefiboset? ... Nadie, pero para el seria una deshonra que un paralitico fuese invitado por el rey. Lo cierto es que a partir de aquel dia, el golpe seco de la muleta de Mefiboset, se dejaba oir por los pasillos del palacio. La historia termina diciendo: "y comia todos los dias, Mefiboset a la mesa del rey"

Al fin y al cabo, todos somos lisiados espirituales que mereciamos la muerte pero Aquel que tenia el derecho de matarnos, nos dio la vida y nos rehabilito. Todos comemos a la mesa del Rey, aunque cojeando. "¿Quien eres tu para juzgar al criado ajeno. Decidid, mas bien, no ser de tropiezo" Pregunta el apostol Pablo en Romanos 14.

Asi que, ya no nos juzguemos mas, ignoremos los errores ajenos, alabemos las virtudes y consideremos cada uno a su projimo como superior. ¿estamos de acuerdo?

NO SEAS OBSESIVO CON LOS DEFECTOS AJENOS, Y PERMISIVOS CON LOS PROPIOS

TOMADO DE UNA PAUSA EN TU VIDA