24 de junio de 2012

Devocional junio 24 de 2012

"El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca."  Lucas 6:45


LOS DOS ENFERMOS


Los dos enfermos compartían la misma sala del hospital. uno de ellos, tenia la orden medica de sentarse cada hora para drenar liquido de sus pulmones. Aprovechaba y miraba por la ventana situada al lado de su cama. El otro no. No podía moverse debido a sus costillas fracturadas y permanecía todo el tiempo boca arriba. Cada vez que su compañero se incorporaba, le describía lo que veía: "Un bello parque alfombrado por la hierba, un niño jugando con su madre, la alegre banda musical que rodeaba la plaza de la ciudad, dos enamorados tomados de la mano, ajenos a la existencia del reloj..."

Su compañero, el que no se movía, solo cerraba los ojos mientras oía el relato e imaginaba lo que escuchaba. Así pasaron los días, aquellos dos internos casi sin darse cuenta. Una mañana descubrieron el cuerpo inerte del enfermo junto a la ventana. Murió en silencio, mientras dormía.

Cambiaron a su vecino a la otra cama y cuando todos se retiraron, el de las costillas rotas, trato de incorporarse con mucho esfuerzo y dolor para poder ver ese paisaje a través del cristal. Fue grande su asombro cuando solo vio una gran pared blanca frente a el.  Intrigado, le pregunto a la enfermera como se explicaban los detallados relatos, a lo que la enfermera respondió que el hombre que acababa de morir era ciego y que, solo imaginaba un mundo ideal para animar con sus relatos a su amigo y ayudarle a soportar su pesar.

Es maravilloso el hacer feliz a los demás, sea cual sea tu situación, ¡te hace rico! El dolor compartido hace doble la pena, son dos los que sufren; pero cuando se comparte la felicidad se multiplica, son dos los que gozan. dice la Biblia en Lucas 6:45 que "El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca." 

¿Vives quejandote?  Analiza tu corazón. tal vez este saturado de pesimismo, rencor, ansiedad, desilusiones y fracasos. Deja que Jesús lo sane y dedicate a animar con optimismo al que sufre a tu lado.


ES MARAVILLOSO HACER FELICES A LOS DEMAS; SI, A SIOS LE AGRADA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario