Devocional Enero 29 de 2012

"Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes." Efesios 4:29

LA RANA EN EL POZO

Cierta rana, distraida en el andar camino, cayo en un hueco muy profundo. Ante los gritos de auxilio, sus amigas acudieron de inmediato, pero al ver la profundidad de aquel pozo, dedujeron que seria imposible que saliera con vida, si es que ya no habia muerto a consecuencia de la caida.

Una tras otra comenzaron a echarle tierra encima para darle una sepultura digna, sin darse cuenta que cada centimetro cubico de tierra arrojada encima, era un centimetro mas que acercaba a la rana hacia la superficie, hasta que por fin, con el hueco casi lleno de tierra, la rana dio un salto y se salvo.

La critica ajena puede tener doble efecto: Te sepulta o te ayuda a superarte en tus logros para que alcances horizontes cada vez mas altos. Depende de como la tomes. Si vives dependiendo de lo que los demas te digan, nunca podras ser objetivo y perderas el rumbo del plan que Dios ideo para ti desde antes de la fundacion del mundo. Claro que no puedes ni debes actuar sin importarte la opinion de los demas o a quien afectas en tu andar.

Pero cada cosa en su lugar. Debes saber diferenciar entre critica, opinion y consejo. Algunas tienen el animo de destruir y sepultar, otras de construir y ayudar. A las primeras las tienes que poner en lugar debido, sabiendo que aunque para los hombres seas asunto acabado, en Dios siempre tendras un nuevo chance si acudes con sinceridad.

Ora por tus acusadores y detractores como Jesus oro diciendo: "Padre perdonalos porque no saben lo que hacen" Lucas 23:34 y aprende el secreto de avanzar sobre las piedras aunque cueste. Las otras, las criticas constructivas, las de los amigos que te aman, las debes atesorar como valiosas joyas. Agradece al Señor por esas personas a tu lado que te animan, corrigen y alientan a continuar. Cuidado, hay hombres cuyas palabras son como golpe de espada. A estos, mejor evitalos.

AGRADECE AL SEÑOR POR ESAS PERSONAS A TU LADO QUE TE ANIMAN, CORRIGEN Y ALIENTAN A CONTINUAR