Devocional Marzo 3 de 2012
"No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas." 2 Corintios 4:18
ES EXTRAÑO
¿No te parece extraño como un billete de $10 parece tan grande cuando lo llevas a la iglesia y tan pequeño cuando lo gastas en la tienda? ¿No te parace extraño que larga se hace 1 hora para dedicar a Dios y que corto se hacen los 90 minutos viendo a tu equipo en un partido de futbol? ¿No te parace extraño que largas parecen 2 horas sentado en una iglesia pero que cortas viendo una pelicula? ¿No te parece extraño que no tengas nada que decirle a Dios cuando oras pero no te alcanzan los minutos platicando con un amigo? ¿No te parace extraño que te cueste leer una pagina de la Biblia pero eres capaz de leerte 100 paginas de internet? ¿No te parece extraño como nos gusta sentarnos en los primeros asientos para ver un recital pero nos esforzamos en buscar los asientos de atras al entrar en una iglesia? ¿No te parace extraño como creemos lo que dicen los periodicos y cuestionamos lo que dice la Biblia? ¿No te parece extraño como se reenvian los correos electronicos que contienen chistes subidos de tono y como cuesta leer y, mucho mas, reenviar aquellos mensajes que te motivan a pensar en Dios?
Nuestras mente atestadas de las cosas pasajeras de esta vida, nuestras agendas repletas de las urgencias cotidianas, nuestra optica distorcionada de la vida nos impelen a descuidar lo escencial y eterno por lo que es pasajero y reemplazable ¿Por que sera?
La respuesta a esta realidad de la enajenacion del hombre hacia DIos, Su Palabra y Su plan para su vida no es otra que el orgullo. Nos cuesta relacionarnos con Dios porque tenemos que en eses encuento se nos presente un ajuste de cuentas del que no sabemos que saldremos ¿Verdad? Si embargo, la sabiduria de la vida se halla en estas palabras "Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.
Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre."
SI NO PUEDES DEDICAR CINCO MINUTOS DE TU DIA A LAS COSAS DEL CIELO, DEDICARAS TODA TU ETERNIDAD A LAS COSAS DEL INFIERNO
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