" Y les daré un corazón, y un espíritu nuevo pondré dentro de ellos; y quitaré el corazón de piedra de en medio de su carne, y les daré un corazón de carne," Ezequiel 11:19
ENCUENTRA TU IDENTIDAD
Hoy en día, muchas personas tienen luchas y dudas sobre su propia identidad, diciendo que su animo esta por el suelo. ¿Que dice la Biblia sobre la necesidad de estimarse y valorarse mucho para funcionar bien en el hogar, el trabajo y la sociedad? ¿Porque sufrimos tanto de sentimientos y emociones como el temor, la vergüenza, el rechazo, el enojo, la ansiedad y la culpa? Para entender la razón de tener una imagen distorsionada, necesitamos regresar al comienzo de la raza humana, ver el resultado del pecado original y los efectos de la caída de Adán y Eva en el jardín de Edén.
La decisión de ellos afecto a todo ser humano hasta el día de hoy. Dice Génesis 3:8 hasta el 4:9 que las consecuencias fueron:
- Muerte espiritual y física. La unión de Adán y Eva tenían con Dios se rompo y quedaron separados de El por desobedecerle.
- Conocimiento perdido de Dios. Antes de la caída. Adán y Eva tuvieron una relación intima, cercana y personal con Dios, pero todo cambio después de su desobediencia, porque trataron de esconderse de Dios, pero ¿Como esconderse? El omnipresente, o sea presente en todas partes.
- Emociones negativas dominantes. ¿Que consecuencias emocionales tiene la humanidad como resultado de la caída? a) Temor y preocupación. b) Vergüenza y Culpabilidad c) Decaimiento y Enojo.
Como ves, la identidad del ser humano se daño con la caída y la tragedia del pecado. El ser humano es un ser devaluado pero Dios puede regenerarlo y hacer un ser totalmente nuevo dentro de el. Así que, si dejamos de tratar de manejar nuestra propia vida, si nos arrepentimos de esa vida pasada y experimentamos un encuentro personal con Cristo mediante la fe, llegaremos a ser HIJOS DE DIOS y por lo tanto, tendremos UNA NUEVA IDENTIDAD:
Así que, cuando perdimos nuestra identidad como resultado de la caída, cuando experimentamos un encuentro personal con Cristo, recibimos una nueva identidad. Nos damos cuenta de que Dios nos ama, nos acepta tal como somos y nos valora en Cristo.
PERDIMOS NUESTRA IDENTIDAD COMO RESULTADO DE LA CAIDA, PERO CUANDO EXPERIMENTAMOS UN ENCUENTRO PERSONAL CON CRISTO, TENEMOS UNA NUEVA IDENTIDAD.
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