"Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia" Colosenses 3:12
RIQUEZAS Y POBREZAS
En sus lecciones de historia, Hill y Aristi Durant, declaran: "mientras siga habiendo pobreza, seguirán habiendo dioses" De aquí inferimos que en los pueblos donde faltan bienes materiales, los humanos tratan de consolarse buscando satisfacción espiritual. Pero también lo opuesto de verdad. En los países escandinavos de perfil pseudo socialista, el estado se hace cargo de sus ciudadanos desde la cuna hasta la muerte.
No tienen ningún tipo de apremio económico porque tienen todas sus necesidades cubiertas. Es este caso se presenta otra patologia: Aquí, las riquezas materiales llevan a la pobreza espiritual. Es por eso que la asistencia a las iglesias ha bajado de manera alarmante en esos lugares.
Esta condición en que la riqueza y la abundancia implican una falta de inquietudes espirituales, explica el sociólogo Peter Berger, puede ser la causa del punto de vista ateo de los jóvenes ricos americanos. En la conferencia: "La sociedad incrédula" el mismo profesional explica que: "los jóvenes con medios abundantes, que no han conocido la necesidad, no buscan el consuelo de una religión tipo convencional, ni mucho menos de la de tipo espiritual, todavía menos atractiva para la carne".
Como vemos, ni lo uno no lo otro es garantía de realización espiritual. Ni la pobreza te acerca a Dios, ni la riqueza te hace agradecerle. No esta allí la clave, en lo material, sino en ver la realidad de tu necesidad espiritual; necesidad que tienen, tanto ricos como pobres; tanto sabios como ignorantes, tanto esclavos como libres. Dice la Biblia en Colosenses 3:12 "Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia".
Esa es la clave, mi amigo, comprender que Cristo es todo, que no existe bien para ti que se encuentre fuera de El; que en El hay verdadera satisfacción sin importar quien eres o cuanto tengas. Solo debes tener una cosa: Un corazón humillado que le busque, le confiese en arrepentimiento y se disponga a experimentar una vida nueva.
NO ES MAS RICO EL QUE MAS TIENE SINO EL QUE MENOS NECESITA. ¡ENCUENTRA TU SATISFACCION EN JESUS! (SAN AGUSTIN)
El Tribunal de Cristo
Hace 5 horas
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