"Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia." Mateo 10:8
AMOR EN UNA LATA DE LECHE
Dos hermanitos en puros harapos, deambulaban por las laderas de una colina, en un arrabal construido allí. Uno tenia 5 años y el otro 10. Iban pidiendo un poco de comida por las calles que rodeaban la colina. Estaban hambrientos. "Vayan a trabajar y no molesten", se oía detrás de las puertas a las que llamaban. "Aquí no hay nada, pordioseros" decía otro.
Por fin, una señora muy amable les dijo, "veré si tengo algo para ustedes" y regreso en unos minutos con un gran lata de leche. Estos niños no lo podían creer: ¡Que fiesta! Ambos se sentaran en la acera. El mas pequeño le dijo al de 10 años: "Tu eres el mayor, toma tu primero" El mayor, miraba de reojo al pequeñito, se llevaba el vaso a su boca y, apretaba sus labios, hacia como que tomaba y decía: "¡Uy que rico! ahora toma tu".
El pequeño tomaba un gran sorbo volvía a darle a su hermano quien repetía el mismo truco haciendo que tomaba y regresaba el vaso a su hermanito. Al cabo de unos segundos, el vaso se había acabado, el mayor no había tomado nada y el menor, quien mas lo necesitaba, todo. Con la lata de leche vacía el mayor dio un salto a la calle y comenzó a jugar alegremente con su hermanito, feliz de haber hecho una noble acción.
Estaba radiante, con el estomago vacío pero con el corazón lleno de alegría. brincaba con la naturalidad de quien no hace nada extraordinario, o aun menor, con la simpleza de quien esta acostumbrado a hacer cosas extraordinarias con la mayor naturalidad.
De aquel muchacho podemos aprender una gran lección: "Quien da, es mas feliz de quien recibe" Es así como se ama, sacrificandose con naturalidad, con tal elegancia, con tal discreción, que los demás ni siquiera puedan agradecernos el servicio que dispensamos. Esto no es nuevo, dice la Biblia que "Mejor es dar que recibir" (Hechos 20:35( y Jesús dijo: "Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia." Mateo 10:8.
RECUERDA: PRIMERO DIOS; SEGUNDO LOS DEMAS Y TERCERO, TU
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