EL TURISTA Y EL CAMPEON
Cuenta una cómica historia que cierto día, un turista americano paseaba por un puerto de Venezuela fotografiando escenas típicas del lugar. Le llamo la atención un humilde pescador que amarraba su bote al muelle con sus peces dorados de excelente talla. "¡Que buena mercadería, Lo felicito!" Le dijo el turista al pescador mientras sacaba mas fotos
"Y... ¿hay mas peces de esos para sacar?" "Por supuesto", respondió aquel hombre. "Y ¿Porque no entra nuevamente y sigue pescando?" pregunto intrigado el turista. "No, suficiente con esto. Aquí tengo para la comida del día" "Bueno, si usted pesca un poco mas, podría salir a vender por las calles su mercadería y no solo podrían comer hoy sino también ganar algo de dinero, explico aquel americano"
¿Usted cree? dijo el pescador, "por supuesto, y con la ganancia obtenida podría comprar un bote mas grande y mejorar su empresa contratando otros pescadores que pesquen para usted en varios botes. De esta manera, sus negocios crecerían" "Y ... ¿Cuanto tiempo me demandarían todo esto este proceso?" Pregunto asombrado aquel humilde latino, "bueno", dijo el turista, "tal vez unos 10 o 15 años. Pero al cabo de ellos usted ya no necesitaría trabajar. Se compraría una casa en la playa, solamente pescaría algunas horas como distracción, viviria muy tranquilo con su mujer y sus hijos y aun le quedaría tiempo para dormir una siesta por la tardes"
A lo que el pescador respondió sonriendo: "Pero si eso es lo que vengo haciendo desde hace tiempo" ... Irónico, ¿verdad? Los humanos siempre estamos buscando la felicidad en conquistas lejanas y ambiciosas ignorando que la felicidad ya esta en nuestras manos. En verdad, la felicidad no es una estación a la cual llegar sino un vehículo en el cual viajar. Cuando el Espíritu de contentamiento, agradecimiento y humildad que Dios provee a través de la fe en Su Hijo Jesucristo ocupa tu ser, serás feliz con lo que tengas, con quien lo tengas, como y cuando lo tengas. Porque tu satisfacción viene de Dios y no de las cosas. Miura al cielo, el gozo verdadero, solo se encuentra allí.
LOS HUMANOS SIEMPRE ESTAMOS BUSCANDO LA FELICIDAD EN CONQUISTAS LEJANAS Y AMBICIOSAS IGNORANDO QUE YA ESTA EN NUESTRAS MANOS.
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