"Puesto que no son ocultos los tiempos al Todopoderoso,
¿Por qué los que le conocen no ven sus días?" Job 24:1
¡TRANQUILO, DIOS NUNCA LLEGA TARDE!
El capitulo 11 del Evangelio de Juan narra el ultimo milagro realizado por Jesús. El relato comienza con la descripción cruda y urgente de la situación que se vivía, uno de los mejores amigos de Jesús estaba gravemente enfermo con una enfermedad mortal. Tragedia, enfermedad, pobreza, catástrofes naturales, etc.., etc.., son palabras que no queremos ver ni de lejos. ¿Verdad?
En los momentos que menos imaginamos nos llega una inesperada noticia y otra vez la adversidad, la prueba, el conflicto, los problemas golpean a nuestra puerta. Aquí nos encontramos con una situación análoga. "El que amas esta enfermo" le dice al Señor los enviados por María y Marta desde la aldea de Betania según el versículo tres. Pero encontramos a Jesús calmado; es como si para EL, lo urgente se tornara en un desafío para mostrar a Dios.
Cuantas oportunidades de servirle pasan ante nuestros ojos a diario y nos sumimos en la desesperación de la crisis en vez de ver en esa crisis una oportunidad para glorificar a Dios. Pero la situación era muy critica, Justamente el hombre de la casa. El que traía el sustento, el que podía defender a sus hermanas, el líder, enferma, y de una el pedido de socorro proveniente desde Betania.
Dice el versículo 6 que "cuando oyó, pues, que estaba enfermo, se quedo dos días mas en el lugar donde estaba" Si, oíste bien. ¡Dos días mas! Cualquiera se da cuenta que en dos días sin atención necesaria cualquier enfermo puede empeorar hasta llegara a un estado critico. ¡Tranquilo! dice el Señor.
El reloj de Dios nunca se atrasa y ademas El conoce todas las cosas. el conoce el futuro ¿Porque temerle al futuro si Dios ya estuvo allí? El es especialista en tornar la tormenta en calma, la noche en día, la prueba en bendición, la muerte en vida y la tristeza en canción. Es por esa magistral y exclusiva cualidad de nuestro Señor que El puede conjugar en dos versículos la muerte y la alegría. Dice el versículo 14: "Lázaro ha muerto" y continua el 15: "y me alegro por vosotros de no haber estado allí para que creáis"
DIOS NO QUERIA SANAR UN ENFERMO, SINO RESUCITAR UN MUERTO ¿DONDE HASY MAS GLORIA?
No hay comentarios:
Publicar un comentario